Garantía Crediticia
¿Está garantizando con sus bienes personales una deuda personal o corporativa?
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En general, las mayores inversiones o aquellas que nos permiten crecer económicamente, requieren de financiación a través de préstamos. Ya sea para negocios o inversiones personales, como es el caso de una propiedad, muchas veces exigen el apoyo financiero de un banco o un particular.
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Los bancos generalmente solicitan el bien adquirido como garantía para el acreedor. Incluso en algunos casos, los activos que se adquieren con el préstamo no son suficiente respaldo para el prestamista y es necesario disponer de bienes adicionales para proteger la deuda. En América Latina, esto último es una práctica común en los bancos que no genera inconvenientes cuando la inversión llega a buen término hasta cancelar el pago. La mayoría de las veces los problemas surgen cuando ocurre algún acontecimiento inesperado que compromete el pago de la deuda.
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El fallecimiento del prestatario usualmente genera un riesgo no planificado, no solamente para el prestamistar, sino para los herederos del deudor, quienes pueden ver comprometido su patrimonio seriamente. Un producto de protección adecuado brinda una solución inmediata tanto para el acreedor como para los sucesores del deudor, saldando la deuda existente y liberando los bienes de prenda o embargo.